Reseña histórica: La existencia de Cuerpos profesionales de bomberos es de tiempos relativamente modernos. Es cierto que en los tiempos antiguos, Roma contaba con les llamados "vigiles", o sea un grupo de hombres, generalmente esclavos, el cual tenía a su cargo la extinción del fuego que se producía en la ciudad. Contaba también por las noches con vigilantes nocturnos que en caso de incendio acudían a su extinción ayudados por los vecinos. Después de Augusto y durante algunos siglos dejaron de existir los tales vigilantes nocturnos, encargándose de la extinción del fuego, cuando se producía, los mismos vecinos, auxiliados con el material que para este caso se tenía almacenado en a diferentes sitios de la ciudad, consistente en cubos, hachas y escaleras de mano. Con esta forma elemental de organización en el servicio de incendios se llegó al siglo XVI, en cuya época se perfeccionó en toda Europa, alistando en cada municipio voluntarios, que al producirse un incendio, dejaban rápidamente el trabajo para acudir a su extinción, provistos del material que de antemano sacaban de los llamados "cuartelillos" que existían a este propósito en cada distrito municipal. Fue en el siglo XVIII, en 2716, cuando se logró formar una compañía de hombres escogidos con la especial misión de extinguir en esta ciudad cualquier incendio que se produjese. Este cuerpo demostró ser eficaz, por lo que fue imitado en otros países, surgiendo así los Cuerpos profesionales de bomberos. En todo Cuerpo de bomberos, comprende el material dos partes: el de extinción de incendios propiamente dicho, y el de salvamento. Figuran en la primera, las llamadas de bombas de moderna acción, los extintores, mangas de conducción del agua, motociclos-bombas, auto-bombas, autómoviles para la conducción del bomberos al lugar del incendio, etc., y en la segunda, escalera de mano de todo orden, cuerdas de salvamento planos de fuerte lona para saltos de alturas, furgones automóviles, tubos de salvamento, cascos de respiración, hachas, aparatos de alumbrado, servicio sanitario, etc. En algunos países, como Argentina y Chile, el servicio de bomberos es atendido por voluntarios que abnegadamente dedican sus esfuerzos en bien de la comunidad sin percibir por ello emolumentos, y siendo, sin embargo, cuerpos de bomberos de gran eficiencia.